Profecía de los 2520 Días
La Prueba del Tiempo
¿Han habido hombres de Dios que han predicado errores? Sí porque somos humanos y lo que hoy nos puede parecer una verdad absoluta, mañana podría probarse que no era verdad. Los pioneros de la Iglesia Adventista vinieron de diferentes trasfondos religiosos. También vieron las cosas de una manera diferente. Pero no todo lo que ellos han dicho ha soportado la prueba del tiempo. La lección que debemos aprender es que no debemos buscar apoyo doctrinal en los hombres ya sea que sean hombres muy cristianos o que hayan recibido mensajes inspirados. En asuntos de fe, debemos confiar únicamente en la Biblia.
Los libros de Daniel y Apocalipsis deben estudiarse a la luz de las Escrituras y no a la luz de ninguna otra revelación. Es un error buscar interpretaciones proféticas en otros libros que no sean la Biblia. Nuestro único canon o regla de fe es la Biblia. Todos los demás escritos son dispensables para la edificación de nuestra fe y no ofrecen garantía de estar libres de error doctrinal. Tampoco necesitamos fuentes inspiradas para ratificar las verdades bíblicas. La Biblia se ratifica a sí misma.
Esquema Profético
Profecía de los 2520 Días
Resulta que en los años del movimiento milerista, algunas personas elaboraron lo que se conoce como la profecía de los 2520 días. Explícitamente no hay tal cosa en la Biblia. El número 2520 es el producto de 7 y 360. ¿Y de dónde salen estos números? Salen de una serie de rompecabezas de versículos que debes de armar y entender en cierta manera para llegar a ese número. El número es parte de un esquema dispensacionalista, es decir, un esquema de fechas y verdades destinadas para cierta época. En temas anteriores, hemos rechazado el esquema dispensacionalista basados en la inmutabilidad de Dios: Dios no cambia. (Mal 3:6)
Base Doctrinal
Yo procederé con vosotros en contra y con ira, y os castigaré aún «siete veces» por vuestros pecados. (Lv 26:28)
En inglés el versículo leería como «siete tiempos» en vez de «siete veces». Siguiendo método de interpretación un día profético equivale a un año literal, llegamos a la conclusión de que Dios castigaría a Israel por 2520 años asumiendo que «tiempo» es un año de 360 días. Lo que tenemos que averiguar ahora es cuándo comienzan los 2520 años de castigo. El castigo comenzó en el año 677 a.C. cuando Babilonia se llevó prisionero al rey Manasés. La profecía termina justamente en el 1843 1844 como se puede apreciar en el esquema milerita. (El error de un año se debe a que no hay año cero.) También podemos iniciar el comienzo en el año 723 a.C. con la caída de Samaria. Entonces el final de la profecía terminaría en 1798, año en el cual se terminó la abominación desoladora de los 1260 días.
Un esquema moderno de esta profecía divide el tiempo en tres dispensaciones: la dispensación del continuo, la dispensación de la abominación desoladora y la dispensación del falso profeta. Las dispensaciones están separadas por las fechas proféticas de 538 d.C. y 1798 d.C., años en el cual el papado comenzó y terminó su dominio. El esquema también considera que Rusia es el rey del sur de la profecía de Daniel 11 y usa la fecha de 11 de septiembre de 2001 (fecha de los atentados terroristas y del supuesto cumplimiento de una visión de Elena White) como el comienzo del sonido de la séptima trompeta del Apocalipsis.
Curiosamente notamos que el período de 2520 años está codificado en las palabras "mene, mene, tekel, uparsín". Las siguientes son medidas hebreas de peso: mina, sequel o siclo y gueras. Pues las palabras "mene, mene, tekel, uparsín" deben interpretarse como medidas: "mina, mina, sequel, peres" Siendo que una mina son 1000 gueras, otra mina son 1000 gueras, un tequel son 20 gueras y peres son 500 gueras, el total suma a 2520. Es más, si compras una sopa de números y letras y las revuelves, a lo mejor también descubras el número 2520!!!
Algunos de los pioneros de la Iglesia Adventista creyeron en la profecía de los 2520 días. Algunos adventistas de hoy, orgullosos de su herencia histórica, se solidarizan con los pioneros y creen en dicha profecía. Para muchos adventistas basta que la llamada pluma inspirada de Elena White lo diga para aceptar la doctrina como una verdad absoluta, pues razonan que una profeta no se puede equivocar. Por tanto, aseveran que Elena White ratificó este esquema profético. Pero si Elena White consideró la profecía de los 2300 días como el período más largo de tiempo, entonces es imposible que endosara la profecía de los 2520 días. El mismo Jaime White declaró en la Review and Herald (26 de enero de 1864) que "no hay ningún período profético en Levíticos 26; y aquellos que imaginan que tales cosas existen y se rompen la cabeza ajustando las fechas están dando golpes al aire".
Dios revelará nuevas verdades y si es cierto que debemos estar prevenidos del error, también es cierto que debemos ser cuidadosos en no rechazar la verdad. La verdad no saldrá de un montón de versos esparcidos que no guardan relación entre sí. Debemos tener cuidado con los rompecabezas doctrinales que se nos presentan frecuentemente. Dios ha presentado las verdades esenciales para la salvación en forma explícita. No hay necesidad de derivar la verdad de conjeturas humanas. La verdad siempre vendrá de una fuente coherente.
Algunos verán en los errores una excusa para desechar todo o para sembrar dudas sobre otras verdades. Un error no justifica el que se descalifique todo el conocimiento que hemos adquirido. Cada caso debe examinarse por sus propios méritos. Un error nos da la oportunidad de rectificar y aumentar en conocimento.
Los escritos de Elena White y los pioneros no son nuestra norma de fe. Es útil leerlos porque hay instrucción para nuestro tiempo, pero jamás deben reemplazar la Biblia. Hay quienes utilizan estos escritos para sugerir que la iglesia tiene cierta ventaja o es la favorita delante de Dios. Se verán muchas sorpresas en el cielo. Hay quienes piensan que estos escritos contienen la clave para descifrar las verdades bíblicas o interpretar la profecía. No hay nada más lejos de la verdad. Ve directamente a las Escrituras. Ellas son su propio intérprete.
Resulta que en los años del movimiento milerista, algunas personas elaboraron lo que se conoce como la profecía de los 2520 días. Explícitamente no hay tal cosa en la Biblia. El número 2520 es el producto de 7 y 360. ¿Y de dónde salen estos números? Salen de una serie de rompecabezas de versículos que debes de armar y entender en cierta manera para llegar a ese número. El número es parte de un esquema dispensacionalista, es decir, un esquema de fechas y verdades destinadas para cierta época. En temas anteriores, hemos rechazado el esquema dispensacionalista basados en la inmutabilidad de Dios: Dios no cambia. (Mal 3:6)
Base Doctrinal
Yo procederé con vosotros en contra y con ira, y os castigaré aún «siete veces» por vuestros pecados. (Lv 26:28)
Profecía de los 2520 Días
En inglés el versículo leería como «siete tiempos» en vez de «siete veces». Siguiendo método de interpretación un día profético equivale a un año literal, llegamos a la conclusión de que Dios castigaría a Israel por 2520 años asumiendo que «tiempo» es un año de 360 días. Lo que tenemos que averiguar ahora es cuándo comienzan los 2520 años de castigo. El castigo comenzó en el año 677 a.C. cuando Babilonia se llevó prisionero al rey Manasés. La profecía termina justamente en el 1843 1844 como se puede apreciar en el esquema milerita. (El error de un año se debe a que no hay año cero.) También podemos iniciar el comienzo en el año 723 a.C. con la caída de Samaria. Entonces el final de la profecía terminaría en 1798, año en el cual se terminó la abominación desoladora de los 1260 días.
Un esquema moderno de esta profecía divide el tiempo en tres dispensaciones: la dispensación del continuo, la dispensación de la abominación desoladora y la dispensación del falso profeta. Las dispensaciones están separadas por las fechas proféticas de 538 d.C. y 1798 d.C., años en el cual el papado comenzó y terminó su dominio. El esquema también considera que Rusia es el rey del sur de la profecía de Daniel 11 y usa la fecha de 11 de septiembre de 2001 (fecha de los atentados terroristas y del supuesto cumplimiento de una visión de Elena White) como el comienzo del sonido de la séptima trompeta del Apocalipsis.
Curiosamente notamos que el período de 2520 años está codificado en las palabras "mene, mene, tekel, uparsín". Las siguientes son medidas hebreas de peso: mina, sequel o siclo y gueras. Pues las palabras "mene, mene, tekel, uparsín" deben interpretarse como medidas: "mina, mina, sequel, peres" Siendo que una mina son 1000 gueras, otra mina son 1000 gueras, un tequel son 20 gueras y peres son 500 gueras, el total suma a 2520. Es más, si compras una sopa de números y letras y las revuelves, a lo mejor también descubras el número 2520!!!
Algunos de los pioneros de la Iglesia Adventista creyeron en la profecía de los 2520 días. Algunos adventistas de hoy, orgullosos de su herencia histórica, se solidarizan con los pioneros y creen en dicha profecía. Para muchos adventistas basta que la llamada pluma inspirada de Elena White lo diga para aceptar la doctrina como una verdad absoluta, pues razonan que una profeta no se puede equivocar. Por tanto, aseveran que Elena White ratificó este esquema profético. Pero si Elena White consideró la profecía de los 2300 días como el período más largo de tiempo, entonces es imposible que endosara la profecía de los 2520 días. El mismo Jaime White declaró en la Review and Herald (26 de enero de 1864) que "no hay ningún período profético en Levíticos 26; y aquellos que imaginan que tales cosas existen y se rompen la cabeza ajustando las fechas están dando golpes al aire".
Dios revelará nuevas verdades y si es cierto que debemos estar prevenidos del error, también es cierto que debemos ser cuidadosos en no rechazar la verdad. La verdad no saldrá de un montón de versos esparcidos que no guardan relación entre sí. Debemos tener cuidado con los rompecabezas doctrinales que se nos presentan frecuentemente. Dios ha presentado las verdades esenciales para la salvación en forma explícita. No hay necesidad de derivar la verdad de conjeturas humanas. La verdad siempre vendrá de una fuente coherente.
Algunos verán en los errores una excusa para desechar todo o para sembrar dudas sobre otras verdades. Un error no justifica el que se descalifique todo el conocimiento que hemos adquirido. Cada caso debe examinarse por sus propios méritos. Un error nos da la oportunidad de rectificar y aumentar en conocimento.
Los escritos de Elena White y los pioneros no son nuestra norma de fe. Es útil leerlos porque hay instrucción para nuestro tiempo, pero jamás deben reemplazar la Biblia. Hay quienes utilizan estos escritos para sugerir que la iglesia tiene cierta ventaja o es la favorita delante de Dios. Se verán muchas sorpresas en el cielo. Hay quienes piensan que estos escritos contienen la clave para descifrar las verdades bíblicas o interpretar la profecía. No hay nada más lejos de la verdad. Ve directamente a las Escrituras. Ellas son su propio intérprete.
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que asco este articulo. QUE DIOS LOS PERDONE Y TENGA MISERICORDIA, son unos pobres instrumentos de satanas los que escribieron este articulo, unas pobres personitas desgraciadas, no tienen idea ni luz ni conocimiento biblico ninguno
ReplyDeleteCon respeto te digo que vuelvas a leer el artículo o que se lo muestres a tu pastor. Eso, si eres adventista. Aquí habla del movimiento millerista.
DeleteQué tal? soy ASD,tengo una duda. Hasta donde entendí, este artículo solo trata de aclarar el asunto de los 2520, no? y pregunto porque veo que la señorita del comentario anterior se enojo, entonces tal vez lo entendí mal algo, porque no estoy enojado.
ReplyDeleteA mí me gustan mucho los libros de la Hna. White, creo que es una profetiza de Dios y que a Dios no le gusta para nada que se burlen de sus profetas. Este artículo no dice nada en contra le EGW, y aclara muy bien el asunto, entonces no le veo lo asqueroso.
https://yosoy144mil.wordpress.com/
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ReplyDeletePersonalmente, yo NO veo profecia alguna en el Capitulo 26 de Leviticos, punto.
ReplyDeleteAhora, entiendo que jamas Nuestra Profetiza Ellen G. White recomendo se utilizaran sus testimonios para reemplazar la Biblia; Jamas, he escuchado a alguien proponer tal practica. La Hna. ha sido una bendicion para mi, y para todos los sinceros estudiantes de la Sagradas Escrituras, sus escritos solamente reiteran lo que la Biblia predice.
Esto blog es un medio para compartir con los amantes de la Verdad Presente, y algunas veces incluyo en este medio articulos que a primera vista parezcan apoyar un punto de vista contrario a los puntos distinctivos de Nuestra Fe.
Si analizamos bien la nueva teologia fue una de las apostasias indicada que surgerian en los ultimos dias; y para mi el 2520 es un ejemplo del error promovido como prueba... Esto fue anticipado por la Biblia y la Pluma Inspirada.
Unknown,
ReplyDeletePrimeramente, ¿no se como dejo ud. un comentario? Pues no accepto comentarios de "anonimos".
Mi Pastor sabe muy bien sobre este NUEVO 'MOVIMIENTO' 2520, y logico sabe sobre el Movimieto Millerista... pues tiene casi 30 años predicando el Evangelio de los Tres Angeles (Apocalipsis 14); No es un neofito.
El versiculo que los aficionados proponentes del 2520 utilizan para apoyar su NUEVA ESPECULACION, no es profetico.
Levitico 26:18,21,24,27 es una creencia filosofica y no Biblica.
Los Testigos de Jehova y algunos otros cultos creen que esos versiculos tienen vigencia profetica, los Adventistas del 7mo dia, no lo consideran de tal manera; Salvo algunos de los tantos que ahora:
1. Guardan las fiestas judias del Viejo Testamento;
2. Usan palabras Hebreas para referirse a Dios y su Hijo Jesus.
3. Creen que no existe El Espiritu Santo; Dicen que es el Espiritu de Jesus el Cristo.
4. Creen en los Sabados Lunaticos; Cada 7 dias, sin llevarse del Calendario. Se rigen por la Luna, y los meses son de 18 dias.
Todas estas creencias son parte de una tergiversacion de la sana doctrina. Y, tambien no son Adventistas, en ves son judia mesianicas, o JESUITICAS.
Aparte, pienso que todo esto es parte de la APOSTASIA OMEGA...