La red ilegal vendían certificados de nacimiento, tarjetas de Seguro Social y licencias de conducir, entre otros, a personas indocumentadas.
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Chicago
Un total de 50 personas fueron acusadas de conspirar para cometer fraude con las identidades de ciudadanos puertorriqueños. Entre las imputaciones figuran la venta a inmigrantes indocumentados de tarjetas de Seguro Social, certificados de nacimiento, licencias y hasta tarjetas de votantes registrados, según el Departamento de Justicia (DOJ).
Los acusados fueron arrestados el pasado en Puerto Rico y en 15 estados del país —incluyendo las localidades de Aurora, Rockford y DeKalb, en Illinois; y Columbus y Fairfield, en Ohio—, como parte de la operación "Island Express".
Los acusados habrían estado operando un mercado negro de documentos y un negocio de fraude de identidad entre abril de 2009 y diciembre de 2011, informó el fiscal general adjunto Lanny Breuer del DOJ.
De acuerdo con las autoridades, los paquetes de documentos de identidad eran vendidos a precios que oscilaban entre $700 y $2,500 a "inmigrantes indocumentados y otros", que vivían en E.U., a los que se les pedían pagos por adelantado de entre $400 y $1,300.
Los documentos judiciales explican que supuestamente unos individuos ubicados en la localidad de Savarona, en Caguas, Puerto Rico, eran los que conseguían las identidades y documentos de los ciudadanos puertorriqueños.
Luego, otros individuos, ubicados en varios estados del país, buscaban clientes. Estos ponían órdenes de documentos llamando por teléfono a sus contrapartes en Puerto Rico usando términos como "camisas", "uniformes" o "ropas".
Específicamente pedían "faldas" para referirse a clientes mujeres y "pantalones" para los hombres, en varias "tallas", con lo cual se referían a las edades.
Los pagos por adelantado eran enviados por transferencias de dinero y los documentos eran enviados desde Puerto Rico a través de correo express, regular o de prioridad. Los nombres de quiénes recibirían los documentos, direcciones y números de transferencias de dinero eran enviados a través de mensajes de texto vía teléfonos celulares, según detallan los documentos.
La demanda señala que los clientes a veces compraban los documentos para asumir la identidad de ciudadanos puertorriqueños y solicitar licencias de manejo legítimas. Otros los compraban para cometer fraude financiero o tratar de obtener un pasaporte estadounidense.
De ser encontrados culpables, los acusados enfrentarían sentencias de 15 años en prisión y multas de $250,000.
También se informó que se creará una página Web para dar información sobre el caso a posibles víctimas. Quienes crean que podrían haber sido víctimas de robo de identidad como parte de este caso pueden llamar a la línea 1-866-DHS-2ICE (1-866-347-2423) de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), o visitar la página de Internet www.ice.gov/tipline.
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