Gabriel Cuevas para Alianzatex
Publicada: Marzo 08, 2017
La organización “Voices of faith”. VATICAN//TEXCOCO PHOTO
CIUDAD DEL VATICANO.- (Texcoco Press).- Mujeres de todo el mundo. Líderes sociales, historias desgarradoras, de determinación y coraje. Este 8 de marzo la organización “Voices of faith” convocó a una jornada de testimonios para reflexionar sobre el rol femenino en la transformación de situaciones límite, de la marginación a la guerra, de la violencia al descarte. Un encuentro en la Casina Pío IV, la sede de la Pontificia Academia para las Ciencias ubicada en el corazón del Vaticano.
“Tengo la esperanza de que nuestro Papa esté mucho más atento a las contribuciones que pueden traer las mujeres a la Iglesia”, aseguró Chantal Götz, una de las organizadoras de la reunión. Una cita de título sugerente: “Moviendo las aguas. Haciendo posible lo imposible” que además de contar con el apoyo del cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, también es acompañada por la Compañía de Jesús. El flamante prepósito general, Arturo Sosa Abascal, fue llamado a tomar la palabra en la apertura de las discusiones.
En la vigilia del encuentro la expectativa era alta. Götz destacó la importancia de la visión femenina en el diálogo y la no violencia. La presencia y la creatividad de las mujeres en la educación y los programas sociales llevados adelante por la Iglesia católica, especialmente en áreas marginadas.
Pero ellas quieren más. Mayor presencia y mayor reconocimiento. Sin desafiar a la estructura eclesiástica tradicional, pero sí lanzando interrogantes y presentando reflexiones. Porque las mujeres no son sólo víctimas, sino también son proactivas. “Ponemos en juego nuestro liderazgo a favor de un diálogo global por la no violencia, no sólo en la Iglesia. Tal vez espero demasiado de una sola persona, pero él nos ha llamado a todos a aportar nuestras ideas”, añadió Götz.
Kerry Robinson, directora ejecutiva de la “Leadership Roundtable”, organización dedicada a promover las mejores prácticas en la gestión de los recuersos de la Iglesia, recordó que la ordenación sacerdotal de mujeres no es posible en la Iglesia, pero reconoció que –muchas veces- el talento de los laicos está “subutilizado”. Pero esa realidad, agregó, no se cambia “pensando que las cosas se deban trastocar por completo”. Es mejor, añadió, poner el foco en las mujeres.
“Cada mañana rezo por el Papa Francisco, estoy agradecida por su elección. La razón de esta esperanza es su mirada humana, cuando llama a ser misericordiosos, a encontrarnos y a escuchar las experiencias de los demás. Creo que él tiene la capacidad para iniciar una reforma positiva, incluso en la curia. Confío en él cuando mira fuera de la curia y pide una Iglesia más incisiva. Es muy empático con las preocupaciones que son comunes a todos.”, estableció.
Las historias de las mujeres fueron elegidas como el centro de la jornada en el Vaticano. Entre las invitadas destacan dos hermanas gemelas refugiadas sirias, Shadan y Nagham, que hasta 2015 ayudaban a niños de entre 6 y 12 años a lidiar con la violencia que sacude a su país.
Originarias de Homs, graduadas en literatura inglesa, vivieron por completo la tragedia de la guerra. Se mudaron a Damasco, primero, y a Mashta al-Helu, en las cercanías de Tartus (noreste), después. Pero cuando cayeron en cuenta que el conflicto las alcanzaría, decidieron escapar hacia la libertad en Europa. Lo hicieron vía mar, desde Turquía hasta Grecia. Como los miles de refugiados que dada día quieren ingresar al “viejo continente”. Arriesgaron su vida y dejaron atrás a su familia. Hoy viven en Gand, Bélgica, con nostalgia de la propia tierra.
Sus relatos se escucharon en el panel titulado “La paz es la habilidad de ser tu mismo. Una conversación con dos hermanas que sobrevivieron a la guerra y al desplazamiento”.
“Creo que las mujeres pueden hacer mucho por cambiar los corazones en Siria. Cuando trabajamos con las madres nos damos cuenta que los cambios son más profundos. Las madres son las que tienen el más importante rol en la vida de los niños, ellas pueden ser un medio para salvar Siria, pueden romper el círculo vicioso de la violencia. Nosotros buscamos la paz y las mujeres tienen el más importante papel en ello”, aseguró Shadan al Vatican Insider.
“Tengo mucha esperanza en el Papa, creo que es un hombre especial y que muchas cosas buenas van a pasar gracias a él. Dios no tiene nada que ver con la guerra y la violencia, la fe puede ayudarnos a cambiar con paz y amor. Pero no para que la gente luche entre sí, eso no es Dios”, agregó.
Un aprecio por Francisco que también expresó Margarite Baranktise, la “madre nacional” de Burundi, fundadora de la “Casa Shalom” y salvadora de unos 30 mil niños del genocidio en ese país africano. Ella también fue invitada al encuentro vaticano, para compartir un pasado de lucha y supervivencia, de determinación y tenacidad.
“El Papa Francisco es un regalo, es una bendición, yo estoy orgullosa de ser católica y ahora más, porque él está dándole dignidad a los más pobres, a los oprimidos, a los sin techo, a los prisioneros, a las mujeres y a los niños”, dijo.
Y sobre el rol de la mujer en la Iglesia católica, añadió: “A veces tengo reuniones con obispos y sacerdotes, a ellos siempre les recuerdo una cosa: nosotros decimos ‘madre de la Iglesia, ruega por nosotros’, ‘madre de Dios, ruega por nosotros’. Las mujeres tienen una vocación especial, si tu dejas a tu madre afuera y no le das un lugar, estás dejando afuera al amor, la ternura. Y el poder más grande en la vida es el amor”.
VATICAN/ANDRÉS BELTRAMO ÁLVAREZ
No comments:
Post a Comment