Santiago vive “era de los condominios”

Las edificaciones tanto del sector privado como público dan esa connotación

Félix Parra | ACTUALIZADO 29.02.2012 - 3:21 am

Vista de un área de la ciudad en la que se observa una panorámica del crecimiento vertical. Foto: Bartolo GARCIA

Crecimiento vertical y expansión de torres y edificios de apartamentos transforman a Santiago en una gran metrópoli en los últimos años, tendencia aumenta cada día de manera vertiginosa.

En importantes zonas residenciales de la hidalga ciudad, conformada por viviendas de uno y dos niveles, esas estructuras han sido demolidas para dar paso a la modernidad con la construcción de edificios de apartamento y condominios muchos de los cuales sobrepasan los 15 pisos.

Urbanizaciones como Rincón Largo, La Rinconada, La Esmeralda, entre otros, la mayoría de las viviendas de uno a dos niveles han sido derribadas y en ese espacio construidas torres de apartamentos bastante elevadas.

De igual manera, zonas antes poco habitadas, hacia donde en los últimos años se ha dirigido el crecimiento de la ciudad, se ha dejado atrás la construcción de casas y en cambio, se levantan amplios proyecto de apartamentos de cinco a siete niveles.

Se trata de áreas como la comunidad de Gurabo hasta hace poco semi-rural o sub-urbanas, Jacagua, La Barranquita, Rafey, las inmediaciones de Barrio Lindo, Leche Rica, Canabacoa, Cerro Don Antonio, donde se han construido numerosos proyectos habitacionales impulsados por el sector privado.

A éstos se suman los proyectos construidos por el Estado, en la Villa Olímpica, Monte Rico, Los Reyes, La Barranquita, La Tabacalera, todos compuestos por proyecto de apartamentos.

La transformación de la ciudad se evidencia también con los nuevos edificios de Salud, que se han construidos en las últimas décadas en Santiago todos los cuales cuentan con una altura significativa.

Lo mismo ocurre con las edificaciones bancarias e instituciones dedica a las pólizas de seguros, infraestructuras de los supermercados que aunque éstas últimas no son muy elevadas, pero dan un cambio en la imagen de la ciudad por su brillantez y facilidades.

En la medida en que las ciudades crecen la tendencia, de acuerdo a los expertos en materia de urbanismo es el crecimiento vertical y no horizontal, porque permite ahorrar terrenos.

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