Saturday, July 18, 2009

Contra principados, contra potestades, contra señores del mundo


Porque no tenemos lucha contra sangre y carne; sino contra principados, contra potestades, contra señores del mundo, gobernadores de estas tinieblas, contra malicias espirituales en los aires....Efesios 6:12.




12 (Eze. 28: 17; Apoc. 12: 7-9; ver EGW com. Sal. 17; Dan. 10: 13; 2 Cor. 2: 11; Gál. 5: 17; Apoc. 16: 13-16).
Una batalla contra principados y potestades.-
Si los seres humanos pudieran conocer el número de los ángeles malos, si pudieran conocer sus artificios y su actividad, habría mucho menos orgullo y frivolidad. Satanás es el príncipe de los demonios. Los ángeles malos sobre los cuales gobierna cumplen sus órdenes. Mediante ellos multiplica sus agentes por todo el mundo. Instiga todo el mal que existe en nuestro mundo.
Pero aunque los principados y las potestades de las tinieblas son muchos en número e incesantes en su actividad, sin embargo, el cristiano nunca debiera sentirse desvalido o desanimado. No podrá tener la esperanza de escapar de la tentación porque merme la eficiencia satánica. El que envió una legión para torturar a un ser humano, no puede ser rechazado únicamente por la sabiduría humana ni por el poder humano.
Hablando de Satanás, el Señor declara que no había verdad en él. Una vez fue hermoso, resplandeciente de luz; pero la Palabra de Dios declara de él: "Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura".
Satanás instigó a otros a rebelarse, y después de que fueron expulsados del cielo los reunió en una alianza para hacer todo el mal posible al hombre, como el único medio de herir a Dios. Ya excluido del cielo, resolvió vengarse haciendo daño a la hechura de Dios. Malos obreros de todas las generaciones se han reunido alrededor del estandarte de rebelión que él estableció. Los ángeles malos se han unido con hombres malos en una lucha contra el reino de Cristo.
El propósito de Satanás ha sido reproducir su propio carácter en los seres humanos. Tan pronto como fue creado el hombre, Satanás resolvió borrar de él la imagen de Dios y colocar su sello donde debiera estar el de Dios. Y ha tenido éxito en instalar en el corazón del hombre el espíritu de envidia, de odio, de ambición. En este mundo ha establecido un reino de oscuridad, del cual él es príncipe, el caudillo de los delitos. Deseaba usurpar el trono de Dios. Como ha fracasado en esto, ha actuado a oscuras en la ilegalidad, en engaño, para usurpar un lugar en los corazones de los hombres. Ha establecido su trono entre Dios y el hombre para apropiarse de la adoración que sólo pertenece a Dios (MS 33, 1911).

(Heb. 1: 14.) ¿Bajo el control de quién?
Quiero que consideréis en qué clase de posición quedaríamos si no hubiera sido por el ministerio de los santos ángeles. . . "No tenemos lucha contra sangre y carne". Hacemos frente a la oposición de hombres; pero hay alguien que está detrás de esa oposición: es el príncipe de las potestades de las tinieblas con sus malos ángeles, que están constantemente en acción ; y necesitamos tener en cuenta -todos nosotros- que nuestra guerra es "contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo". 1120
¿Quién es el que está rigiendo el mundo hoy día, y quiénes son los que han elegido estar bajo el estandarte del príncipe de las tinieblas? Sí, es casi todo el mundo. Todos los que no han aceptado a Jesucristo, han elegido como su caudillo al príncipe de las tinieblas, y tan pronto como están bajo su estandarte, están en relación con sus ángeles malos. La mente de los hombres está siendo controlada, o bien por los ángeles malos, o por los ángeles de Dios. Nuestra mente está entregada al dominio de Dios, o al dominio de los poderes de las tinieblas; y sería bueno que sepamos dónde nos encontramos hoy: si bajo el estandarte teñido en sangre del Príncipe Emanuel, o bajo el negro estandarte de los poderes de las tinieblas.
Debemos hacer toda la preparación que podamos para resistir al enemigo de las almas. Se han tomado todas las medidas; en el plan de Dios se ha dispuesto todo para que el hombre no sea abandonado a sus propios impulsos, a sus facultades limitadas para continuar la lucha contra los poderes de las tinieblas, porque ciertamente fracasaría si fuera abandonado a sí mismo (MS 1, 1890).

(Sal. 34: 7.) Fieles centinelas en guardia.
Hay ángeles buenos y malos. Satanás siempre está alerta para engañar y extraviar. Usa toda fascinación para seducir a los hombres a que entren en el camino ancho de la desobediencia. Actúa para confundir los entendimientos con conceptos erróneos, y para eliminar las señales colocando su falsa inscripción en las indicaciones que Dios ha establecido para indicar el camino correcto. Debido a que estos instrumentos de maldad se esfuerzan por eclipsar del alma todo rayo de luz, es por lo que se ha dispuesto que seres celestiales hagan su obra de ministrar, guiar, proteger y controlar a los que serán herederos de salvación. Nadie debe desesperarse debido a sus tendencias heredadas hacia el mal; pero cuando el Espíritu de Dios convence de pecado, el pecador debe arrepentirse, confesar y abandonar el mal. Centinelas fieles están en guardia para dirigir a las almas por sendas de rectitud (MS 8, 1900).

Constante lucha de los ángeles.-
Si se descorriera la cortina y cada uno pudiera percibir las actividades constantes de la familia celestial para preservar a los habitantes de la tierra de las seductoras supercherías de Satanás, para que debido a su descuido no sean descarriadas por la estrategia satánica, perderían mucha de su confianza propia y autosuficiencia. Verían que los ejércitos del cielo están en continua lucha con los instrumentos satánicos para ganar victorias en favor de aquellos que no se dan cuenta de su peligro, y que siguen en su inconsciente indiferencia (MS 32, 1900).

.